lunes, 9 de noviembre de 2009

Entrevista a Raúl Gálvez Cuéllar en la Casa de la Literatura Peruana


Casa de la Literatura Peruana. Jr. Ancash 207 - Cercado de Lima antigua, Estación Central de Desamparados.






La Casa de la Literatura Peruana fue inaugurada el 20 de octubre, hay salas de usos múltiples donde se difundirán videos, se realizarán mesas redondas, seminarios y charlas magistrales.

En el recinto hay dos bulevares; uno dedicado a los autores y otro dedicado a la lectura. En el primero, los autores podrán vender sus libros, firmar autógrafos y conversar con el público. En el segundo, las editoriales podrán vender sus libros permitiendo además, que las obras en exhibición puedan ser consultadas por el público en general. (Texto Fuente RPP)

jueves, 5 de noviembre de 2009

DOS JÓVENES ESCRITORES PERUANOS


 
 En las últimas 24 horas conocí a dos jóvenes escritores peruanos en la Casa de la Literatura Peruana: Abel Cardejal, poeta de 25 años; y Jesús Jara, Prosista de 22.
 
Me solicitaron unas palabras sobre sus libros y les dije que lo haría dentro de un año por tener otros textos en espera.
 
Pero yo "escribo para los jóvenes que escriben" y no podía dejar pasar ni un día sin hacerlo.
 
                                                raul galvez cuellar
                                         Lima, 05 de noviembre de 2009

PARA QUE ME ODIES COMO TE AMO, de ABEL CARDEJAL


He leído " Para que me odies como te amo", buen libro de poemas de Abel Cardejal, de temática romántica, pulcramente elaborado, con realismo y pasión reflexiva que estructura un diálogo constante y estilista. Se trata de una poesía de acento personal y alturado, fino y delicado entre dudas e incertidumbres alimentadas por el ímpetu de la juventud: ..."Señorita dolor de cabeza para mis ánimos sementales...", escribe el poeta.
 
He notado un martillar insistente en la cadena lingûística de este notable aeda, experto en anáforas y aliteraciones. Basta ver "Claro Oscuro", "Temo", "Invito Yo" o "Duele y LLueve" para encontrar estas figuras literarias que nos brinda un preciosismo formal que no sólo nos deslumbra por su burilada arquitectura sino que juega entre aparentes aunque razonadas contradicciones como cuando dice "duele tener que vivir muy cerca de donde tú no vives" (Duele y LLueve, Lima 2008); "enséñame a decir hasta pronto para no decirte adiós" (Enséñame, Bs. Aires 2008); "me tienes enamorado con tu indiferencia fiel" (Solí", Bogotá 2009).
 
El libro discurre entre promesas o "huelgas de amor", o entre nostalgias o interrogantes como en el ejemplo del poema "Mía Alejandra y Yo" en que se pregunta si será feliz en el Buenos Aires del 2008.
 
En suma, Para que me Odies como te Amo es un gran libro y auguro para Abel Cardejal un futuro promisor en la Literatura Peruana.
 
                                                raul galvez cuellar
                                        Lima, 03 de noviembre de 2009
 
 

AMOR A QUEMARROPA, de JESÚS JARA


Amor a Quemarropa es un libro osado, crudo, irreverente pero sincero, de respiraciones cortas y aliento contenido ante lo imprevisible, donde el narrador usa la licencia del literato para entregar un conjunto de relatos que lindan con la insolencia que sólo su juventud es capaz de liberar.
 
Con estilo correcto su autor despliega un contexto de atrevida obsesión por la muerte -léase intención criminal en los personajes-, y un permanente desenfado sexual donde es imposible tropezar con limitaciones.
 
Estamos ante un texto fuerte, impactante y amoral al estilo de Stirner y Nietzsche, en cuanto no admite sanción en las conductas absolutamente ajenas a cualesquiera consideraciones del bien y del mal.
 
En términos generales el manejo del discurso es interesante, y así vemos que sin ahondar en análisis de los episodios escabrosos, podemos distinguir la alternancia en "Paz" (pag. 55), lo insólito en "Al Escritor" (43); y una clara influencia de Guy de Maupassant en "Concierto" (41) y "Regalo" (67), al dejar en suspenso al lector que desconoce el final de lo que se cuenta.
 
Amor a Quemarropa es un buen libro.
 
                                                        raul galvez cuellar
                                                Lima, 04 de noviembre de 2009